La jarrita de la Puerta del Vino

En la mazmorra situada en la Puerta del Vino de la Alhambra se encontró una singular jarrita nazarí de cerámica pintada en negro. Tiene una amplia base redonda, carena baja en la parte inferior del cuerpo y paredes exvasadas que, tras dos baquetones, presenta un cuello con borde recto e invasado y labio apuntado. Presenta dos asas de perfil quebrado, sección irregular y acanaladura central, que parten del cuello y apoyan en la zona más estrecha del cuerpo. De una de las asas cuelga una anilla. La decoración pintada consiste en una serie de motivos geométricos lineales que se desarrollan desde arriba hasta la zona inferior del cuerpo. El borde exterior del cuello se cubre totalmente con una banda ancha horizontal y en el cuerpo se conforma un marco cuadrangular en una zona no invadida por el trazo de líneas verticales y horizontales de desarrollo paralelo. En este espacio se inscribe un doble círculo concéntrico con centro señalado y al que confluyen cuatro líneas diagonales. Las asas también están pintadas con trazos horizontales irregulares.