Línea defensiva del sultanato nazarí. El castillo de Íllora

En el mes de agosto la charla temática del museo estára dedicada al castillo de Illora y la línea defensiva del sultanato nazarí, y será conducida por Francisca Viedma. En esta conferencia, que tendrá lugar los domingos 14 y 21 del mes, se realizará una aproximación histórica a la frontera norte del sultanado nazarí, prestando especial atención al castillo de Íllora y a su importancia para el Reino de Granada. El sultanato granadino tenía una extensión de unos 30.000 km2, y frontera con los reinos castellanos superaba los 1.000 km de longitud, un vasto territorio que era preciso defender. Presionados por el norte por los cristianos y al sur por los benimeríes del norte de África, el reino consiguió sobrevivir 250 años gracias a numerosos factores, como una orografía muy difícil, la creación de un estratégico sistema defensivo y el mantenimiento de un ejército reforzado con efectivos militares bereberes. Defender la frontera y la estabilidad del sultanato nazarí suponía contar con un ejército muy estricto en su funcionamiento jerárquico y organización, y establecer unas estructuras fortificadas de diferentes tipologías, de las que el Castillo de Íllora fomaba parte. Normalmente estas estructuras están construidas con materiales duraderos que irán evolucionando a medida que lo hacen las técnicas militares. La utilización de la artillería provocó un cambio en la forma de levantar los muros, pasando del sillarejo a la mampostería, mucho más fuerte. Los espacios defensivos estaban situados en lugares estretégicos y gran visibilidad. Morfológicamente contaban con una serie de elementos básicos, como son: los muros, torres o almenas, entre otros. Los más evolucionados podían tener aljibes, torres del homenaje, torres albarranas, barbacanas, etc. En relación al castillo de Íllora, la primera referencia que tenemos es sólo una cita en la que aparece como uno de los puntos de paso de los itinerarios que partían de Madinat Ilbira y que se remontan por lo menos a principios del siglo X. Las fuentes escritas que hablan de la configuración urbana de Íllora son exclusivamente de parte castellana. Se puede nombrar ?La crónica de D. Lucas Iranzo?, ?La crónica del halconero de Juan II?, así como ?La crónica de Alfonso XI?. Este castillo está situado en la comarca de los Montes Occidentales y formaba parte de la estructura defensiva que se extendía entre Guadix y Loja. Íllora fue una plaza trascendental en la defensa de Granada debido a su localización en las estribaciones meridionales de las sierras subéticas y borde septentrional de la Vega de Granada, participando del control de los pasos naturales hacia la depresión del Guadalquivir. Hasta 1245 las plazas de Íllora, Montefrío y Moclín formaban parte de la segunda línea defensiva del sultanato nazarí, pero tras la conquista cristiana de las fortalezas de Martos, Víboras, Alcaudete y Porcuna (1125-1245), que formaban la línea de avanzadilla del poder musulmán, los pueblos de los Montes Occidentales se convirtieron en uno de los sectores defensivos más importantes del reino granadino. Si quieres conocer más sobre este tema te esperamos los domingos día 14 y 21 a las 12h en el Museo de la Alhambra. Entrada gratuita.