El agua y su importancia en el mundo musulmán

Los domingos 13 y 20 del mes de septiembre, a las 12:00 de la mañana, Matilde Cortés presenta una charla sobre el agua y su importancia en el mundo hispanomusulmán. El agua es fuente de vida y en la Alhambra juega un papel determinante a la hora de definir el paisaje, el espacio y las formas. No se puede entender la Alhambra sin el elemento que le dio razón de ser. Y para conocer un poco más este tema, en la conferencia se analizará la procedencia, uso y función del agua dentro de la ciudad palatina. La Alhambra está regada por la Acequia Real, un sistema hidráulico que recorre todo el recinto como arteria principal y que fue base para la agricultura en las paratas cultivadas. Partiendo de las captaciones de agua romanas, los residentes crearon diversos sistemas (acequias menores, depósitos, norias?) para distribuir el agua por toda la ciudad palatina. También se usaron acueductos y válvulas de seguridad para cuando el afluente de agua fuese excesivo. La acequia principal no tuvo pozos y el sistema de albercas, usado como espacios para almacenar el agua en caso de escasez, tuvo también un uso decorativo en los espacios palaciegos de la Alhambra. Además, servía como sistema de filtrado y decantado, consiguiendo que el agua siempre estuviera limpia. Una red de atanores de cerámica repartía el agua en todos los espacios y la llevaba a los hogares y a los baños públicos, en los que había pilas que dispensaban agua fría y caliente. Pero el agua, además de cumplir su función práctica, era usada como elemento decorativo dentro de los palacios y casas. Sus contenedores (albercas, fuentes…) se tallaban con formas vegetales y geométricas; también se incluía epigrafía con poemas alusivos a este líquido vital, combinando así el arte de la poesía y la ornamentación escultórica. Se puede conocer más sobre este interesante tema los domingos 13 y 20 del mes de septiembre, a las 12:00 de la mañana, en la sala IV del Museo de la Alhambra. Actividad gratuita y sin reserva previa. �