
El interior de esta torre residencial es uno de los espacios más exquisitos de toda la Alhambra. Se accede a la estancia principal a través de un acceso en recodo para conservar la intimidad y se puede considerar como una auténtica torre-palacio. La Torre de la Cautiva es llamada “qalahurra” en el poema epigráfico que figura en el interior de su estancia principal.