Candil de pie alto nazarí

En el ajuar de la casa hispanomusulmana son habituales los objetos para iluminar en la oscuridad, como los candiles. Fabricados en distintos materiales, las piezas adquirieron tratamientos decorativos muy diferentes en función del estrato social al que iban destinadas. Sus formas fueron además evolucionando y transformándose a través de los siglos. Los candiles de cerámica, elementos útiles y con bajo coste de fabricación, eran elemento común en todas las viviendas.

Los ejemplos de candiles de cerámica de época nazarí presentan una rica variedad tipológica, siendo el de pie alto una forma que aparece en el siglo XII y se hace muy frecuente en los siglos XIII y XIV, con un fuste cada vez más estilizado. Frente a otros modelos de candiles, el de pie alto facilitaba el traslado y que el radio de luz tuviera mayor extensión.

Un ejemplo de este tipo de candiles es esta pieza nazarí del siglo XIV. Aunque tiene un diseño sencillo, su factura está muy cuidada y un vidriado en verde cubre uniformemente la superficie visible. La pieza presenta peana plana con pared vertical , recorrida al exterior por una acanaladura, con borde recto y labio. El fuste, con forma cilíndrica más ancha en su parte inferior, se ve interrumpido por seis molduras de sección triangular.

La cazoleta superior, en la que se vertía el combustible, muestra una piquera con un pellizco muy acentuado. Tiene un asa que apoya en el depósito y desciende para conectar con el exterior de la peana, y permitía que la lámpara fuese transportada fácilmente de un lugar a otro con una sola mano.

Las piezas más comunes se vidriaban en un solo tono, como el que hemos visto, mientras que los de lujo aparecen con decoración más compleja con reflejos dorados o sólo dorados, o con motivos en blanco y azul, como este otro ejemplo de candil procedente de Almería.

Los alfares mudéjares también produjeron este tipo de piezas, al menos desde el siglo XIV, y se continuó su fabricación también en época moderna. En este sentido, uno de los mejores ejemplos lo constituyen los alfares de Manises (Valencia) de los que proviene esta pieza. Este candil de pie alto sigue los modelos nazaríes, como puede observarse.